lunes, 21 de febrero de 2011

Hoy leyendo El País de España, encontré un artículo que me estimuló a escribir este comentario:


Sobre la real politik, y la política más idealista. Yo entiendo la idea de que hay una realidad cruda, que existe la injusticia, que existe la corrupción, la pobreza, la violencia, la droga... si, si, yo entiendo todo eso, pero no me convence que porque "exista", sea innevitable y haya que engancharse en todas las chanchadas porque "es real".
Entiendo la presión social, las necesidades, pero devuelta, no me convence el discurso "es la realidad" para que todo un país funcione mal, para que una sociedad entera soporte el maltrato y la malatención porque sí, porque "es así". NO, no me gusta. No me convence.

No me convence el argumento "son los únicos que pueden gobernar, porque tienen el aparato". Y qué? por eso voy a tener que darle mi voto? darle la legitimidad de Gobierno ?, tan solo porque ellos se encargaron de estrucurar una pirámide jerárquica de fidelidades corruptas?. Nah, me parece una pedorrada, me parecen enfermos psicópatas de cuarta. De esos que venden su país, su tierra y después mandan a sus hijos a las universidades de aquellos paises a los que publicamente critican tanto.

Yo tampoco propongo vivir en un mundo de fantasías donde la pobreza, la violencia y la injustica no exista, pero tampoco creo que se trate de blanco o negro, de utopias limpias o de real politik oscura, donde la corrupción es condición de la política. Muy por el contrario, pienso que si se pueden hacer bien las cosas. Y que si cada uno hace bien su laburo, las cosas estarían mucho mejor.

Por lo tanto, solo le voy a dar mi voto a aquel que labure seriamente.

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